Un cambio normativo reducirá el atasco en las licencias de obras en el Casco Histórico

No habrá que esperar a la Calificación Ambiental para la autorización urbanística, reduciéndose los tiempos entre 2 y 3 meses

Ante el atasco que sufren las licencias de obras y apertura en el Casco Histórico de Sevilla, la Gerencia Municipal de Urbanismo prepara una modificación de la Ordenanza Reguladora de Obras y Actividades (Oroa) para reducir la burocracia y eliminar trámiets innecesarios que agilizarán las autorizaciones y facilitarán la ejecución de importantes proyectos de inversión. Amparo Guerrero, jefe del servicio de Licencias e Inspección de la Gerencia Municipal de Urbanismo, ha explicado que entre las principales novedades estarán que las licencias de obras no tendrán que esperar a la Calificación Ambiental, que emite el servicio de Protección Ambiental. Cuando se otorge la licencia de apertura tendrá que estar resuelta la Calificación Ambiental.

Actualmente, las licencias de obras en el Centro Histórico se demoran de siete meses. Aquellos proyectos que necesitan Calificación Ambiental tardan como mínimo diez meses y como máximos varios años, según los arquitectos. Con el cambio normativo que prepara el Ayuntamiento, el tiempo de espera de una licencia en proyectos con Calificación Ambiental podría reducirse de dos a tres meses. Por otra parte, Urbanismo estudia que los promotores puedan presentar declaración responsable con técnico en obras menores en el Centro Histórico, lo que reduciría un 40% el número de expedientes.

Estos cambios normativos tendrán una gran repercusión «porque el 90% de las licencias están paradas por la Calificación Ambiental», según Amparo Guerrero, que subraya que esas 3.000 licencias atascadas no están en Urbanismo. Por otra parte, la modificación de la Oroa tendrá también un gran impacto porque han aumentado un 30% las solicitudes de licencia de obra y el 70% de ellas corresponden al casco histórico.

Guerrero ha señalado que se ampliará la declaración responsable como vía de tramitación para proyectos hoteleros de hasta 1.000 metros cuadrados de superficie y para centros sanitarios sin hospitalización y educativos de hasta 750 metros cuadrados.

En unas jornada celebradas en la Fundación para la Investigación y Difusión de la Arquitectura (Fidas) sobre las dificultades que los arquitectos encuentran para actuar en el Centro Histórico, la jefe del servicio municipal de Licencias ha concluido que las licencias de obras se agilizarán también porque Urbanismo asumirá las competencias de los informes de seguridad y protección contra incendios, de los que antes se ocupaba el servicio de Protección Ambiental. La agilización de licencias podría ser mayor si, como se pretende, finalmente se aprueba la declaración responsable con técnico en obras menores en el casco histórico.

La modificación de la Ordenanza Reguladora de Obras y Actividades tendrá que ser informada favorablemente por el secretario del Ayuntamiento, pasar por el Consejo de Gobierno de la Gerencia y aprobarse en Pleno, por lo que Juan Mauduit, jefe adjunto del servicio de Licencias e Inspección Urbanística, prevé que los cambios legales estarán en vigor en un mes y medio.

Por otra parte, Urbanismo emitirá «circulares» para que los técnicos sepan como actuar en aquellos sectores afectados por la sentencia del TSJA que anuló parte del PGOU a raíz de un recurso de la Asociación para la Defensa del Patrimonio (Aepa). En estos momentos el sector 7 Catedral está sin plan y se rige por el PGOU de 1987, mientras que otros planes especiales, como los de Santa Catalina-Santiago (4), Encarnación-Magdalena (8), La Calzada-Fábrica de Artillería (19), San Andrés-San Martín y Magdalena, están afectados por la sentencia de TSJA, que limita las actuaciones urbanísticas.

María Luz Parrado, arquitecta y jefe de sección de la Gerencia Municipal de Urbanismo, recordó que en los edificios no catalogados de esos sectores es posible demoler para levantar un edificio de nueva planta, pero no hacer áticos. En cuanto a las casas catalogadas, aquellas con protección A y B sólo admiten «cirugía menor», mientras que en las C y D únicamente es posible hacer obras de conservación sin aumento de edificabilidad. «Los que tienen áticos no tendrán que ser derribados pero si se tiran por obra nueva ya no se podrán volver a construir», advierte Parrado, quien recuerda que esos áticos sólo podrán tener usos residenciales vinculados con viviendas situadas en plantas inferiores.

Juan Mauduit ha manifestado que actualmente existe un «laberinto normativo» desde la sentencia de 2007 de Adepa, que ha provocado -a su juicio- «una sensación de inseguridad», lo que explica que en los últimos siete años se hayan producido numerosos informes aclaratorios», reconociendo que se está produciendo un alto nivel de subjetividad cuando se toman decisiones en esos sectores.

Las obras que se realizan en edificios del Casco Histórico corresponden a sectores afectadas por la sentencia de Adepa tienen que pasar por la Comisión Provincial de Patrimonio, y los que tienen plan especial van a la comisión local de Patrimonio. Ante ello, Juan Fernández Naranjo, arquitecto de la delegación de Cultura de la Junta en Sevilla y ponente en la Comisión de Patrimonio, defendió que se deleguen competencias en los ayuntamientos para evitar que se alarguen excesivamente los plazos.

El arquitecto Honorio Aguilar ha recordado en las jornadas de Fidas que la Junta espera recibir de Urbanismo de Sevilla una solicitud para delegar competencias en los entornos BIC de planes especiales anteriores a 2006, lo que evitaría que fueran a la Comisión Provincial de Patrimonio. A su juicio, la situación es «kafkiana: una modificación de tabiquería de una vivienda en Doctor Fedriani necesita informe de esa comisión por tratarse el entorno del Hospital de la Cinco Llagas». Además, Aguilar ha dicho que si queremos promover la rehabilitación del Centro Histórico deben aprobarse bonificaciones de las tasas de licencias de obras y del Impuesto de Construcciones y Obras (Icio) en edificios catalogados D, como ocurre con las edificaciones catalogados como C.

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